La gente con la que hablo en el norte-norte (un pueblito llamado Usjoki, arriba del todo en Finlandia) me ha dicho que no hará demasiado frío aún por esas fechas, pero convencido de que sus conceptos de "no demasiado frío" y los míos, que soy friolero hasta decir basta, no deben ser muy parecidos, he mirado webs de información sobre temperaturas anuales y, miratú, estaba en lo cierto.
"No demasiado frío" para alguien que vive en el círculo polar son unos 5-6 grados.
Eso en moto, a 100 km/h, se convierte en -5º C (la sensación termica desciende unos 10 grados por cada 100 km/h), así que, en previsión de que se me van a encoger los huevillos de frío, tenía que equiparme en condiciones.
Inmediatamente empecé a mirar por internet ropa calefactable, es decir, con zonas que emiten calor, y dí con una empresa española (vasca) que es poco conocida y comercializa unas prendas que tienen una pinta fantástica y unos precios realmente geniales. La empresa es Heat&Sport y su marca es Kernok.
